"
...Tengo tanto que decirte...YO TENGO TANTO DE MÍ PARA CONTARTE... tengo tanto en mis adentros...
sudor de prosa y poesía dignas de un concierto sólo tuyo...
...Regreso hoy, para soplarte los oídos e invadirte y atascarme en tus sentidos..."
Cuando dice "regreso para soplarte los oídos e invadirte", siempre pienso en el Espíritu Santo, que actúa así en nuestra mente...
¡Qué bueno! ¡Qué Gracia!
domingo, 20 de septiembre de 2009
¡Buenaaaaas!
" Lo maravilloso de la vida
es que todo puede suceder..."
Días pasados vi en televisión,
la vida
de Bruce Lee.
¡Sencillamente maravillosa!
Un ejemplo de vida para su hijo.
Bruce pensaba mucho en él
y en el ejemplo que le dejaría.
Pero ese hijo, Brandon, falleció
muy rápido.
Bruce, resumía sus principios
en uno solo,
que decía:
"...La clave de la inmortalidad
es saber vivir una vida
digna de ser recordada..."
De modo que su proceder
se regía bajo esas palabras, siempre.
Es bueno preservar en el alma
algún refrán que haya tocado
y activado nuestra razón.
Y para que nuestra vida sea digna
de ser recordada,
tenemos que trabajar cotidianamente
en ese desafío,
hasta que se haga costumbre.
Una de las esencias humanas,
debe ser la alegría, el optimismo,
lo decimos siempre.
Todo se activa con la buena noticia.
Nuestro organismo es tan maleable, tan vulnerable y sensible que, obedeciendo lo que el cerebro le ordena,va acidulándose con nuestras órdenes. Sí, o se torna ácido o dulce de acuerdo a mis elecciones.
A mí, me sucedía periódicamente que cuando recibía una noticia fuerte
( en alegría o pena) quedaba sin voz, completamente disfónica.
Hice muchos tratamientos, me cargaron de medicaciones, hasta que una doctora en Psicología con quien conversábamos asiduamente, me aseguró que eso
provenía de mi carácter. De la forma en que resolvía los acontecimientos.
¡Y lo he comprobado!
Como era muy introvertida, todo lo callaba, todo lo guardaba en mis entrañas
y así llegaba el instante en que saturaba todo mi ser. Somatizaba todo.
Me trabajé mucho, me costaba mares cambiar. Pero recordaba sus palabras:
"...El optimismo nace y se activa en el cíngulo anterior y en las amígdalas. Es desde allí donde se compromete la regulación de las respuestas emocionales."
La emoción y la adrenalina, fluyen como manantial sanador en serotonina, dopamina y regulan los estados anímicos.
Con la buena noticia cambia el metabolismo (también con la mala noticia) .
Por eso es favorable saber dominarnos y conducir ese vehiculo por la dirección conveniente. Si la noticia es buena, una carcajada a toda voz, no debe avergonzarnos. Y si la noticia es mala, tratar de "ver lo positivo", para que ella no se estanque y pueda circular hasta eliminarla con nuestra angustia. ¡Limpiar de inmediato!. Porque todo influye en el organismo.
Por eso muchas veces nuestras tristezas nos anudan o inflaman las cuerdas vocales y enmudecemos.
¡Créanme que he podido solucionar mi problema!
Recuerdo también que en mi niñez, cuando llórábamos, por una caída en medio de los juegos y corridas propios de la edad, mi abuelo nos llamaba a su lado y nos golpeaba el pecho y decía:__Bueno, bueno, ya pasa...__
Nunca comprendí el porqué.
Hasta que mi psicóloga me explicó que es el lugar de la glándula TIMO, encargada de segregar las hormonas del carácter. y que golpeándola la activamos. Especialmente en la infancia, porque después tiende a desaparecer.
Les aseguro que (tal vez es idea ) aún hoy siento que mejoro al activarla, generalmente bajo la ducha de agua tibia.
Estudié mucho sobre el proceder de esta glándula.
Es el puente entre mente y cuerpo. Sobre ella impacta la acción tensora del estrés. Si la mente sintoniza un pensamiento depresor, vence la acción benéfica del TIMO y el ánimo decae.
El odio o una conversación negativa, la crítica, las angustias sobre las que nos empantanamos, son veneno puro. La glándula pierde turgencia y se achica en 24 horas.
Se ha comprobado esto en los soldados en lucha, en los asesino, ladrones, el miedo los aterra y allí desvanece la glándula.
TIMO : del griego thymos: energía vivificante, alegría de vivir, salud brillante.
Controla las energías vitales del cuerpo. Es una vigilancia inmunológica. Escuela y fábrica de linfocitos, glóbulos blancos responsables de las reacciones inmunol. del organismo.
Los linfocitos llegan inmaduros desde la médula de los huesos, al timo. Los linfocitos maduran y emigran para establecerse en os ganglios linfáticos y en el bazo. Allí generan otros linfocitos llamados glóbulos T (derivado del nombre de la glándula). a través del torrente sanguíneo durante toda la vida, el timo sigue aportando hormonas y ejerciendo influencias sobre estos glóbulos. Los entrena para reconocer y atacar hasta destruir, todas las células anormales y organismos que llegan al cuerpo.
Así lo afirma su descubridor, el Doctor Sir Mac Farlane Burnet, australiano, Premio Nobel Medicina.
Por otra parte, en cuanto a la tensión o distensión de nuestros músculos o nervios en esos momentos de baja producción de hormonas, cada músculo está íntimamente relacionado con un órgano del cuerpo determinado. Una debilidad en un músculo, significa que existe un problema en el órgano correspondiente.
Él nos comunica si una noticia, una canción, un baile, una ropa ajustada o no, es bueno para el cuerpo.
Si es sano, aumenta la energía del músculo.
Si es venenoso, nos avisa retirando la turgencia del músculo.
Esto procede de un estudio del Dr. Diamond, kinesiólogo del Comportamiento humano.
¡Por lo tanto!... con semejantes afirmaciones especializadas, sólo nos queda saber dominar nuestras emociones, para lograr el mejor rinde de nuestras hormonas.
Dios ha dispuesto todo, tan sabiamente..¡tan dulcemente! que no podemos ignorar su obra, con angustias tontas en vez de reir a la vida y¡ ACEPTAR TODO LO QUE DE ÉL VENGA, EL TODOPODEROSO SABE!.-
¿GUSTÓ?... OJALA.- BESITOS-
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JORGE LUIS BORGES
"...No hay un solo día que no estemos un instante en el paraíso, porque siempre hay algo o alguien, que, con su sola presencia, aliviana la pesadumbre de vivir..."
De Alfonsina...
"...Hielo y más hielo recogí en la vida.
Yo necesito un sol que me disuelva..."
Pobrecita, no reconoció el fuego
del Espíritu, que la habitó siempre,
en su raciocinio, en su fortaleza,
en su ciencia...
¡QUIÉN si no ÉL!
Yo necesito un sol que me disuelva..."
Pobrecita, no reconoció el fuego
del Espíritu, que la habitó siempre,
en su raciocinio, en su fortaleza,
en su ciencia...
¡QUIÉN si no ÉL!
¡Bienvenidos!
De una canción de Baglietto, que hace magistralmente junto al incomparable Lito Vitale, llamada "Y no olvides que un día, tú fuiste sol", me encantó rescatar algunos de sus versos...son maravillosos...
"No dejes de asombrarte
ante un nuevo nacimiento de tu jardín...
no escondas ni la pena ni el dolor...
no saltes en pedazos,
no entregues tu diamante,
no permitas que se pierda tu cosecha...
¡busca la raiz!
Baja hasta tus valles
que éste es tu país,
donde están tus riendas,
tu espuma, tu verdad...
...donde naufragaste, haz crecer mil rosas..."
Lindo, como consigna de una mañana, ¿verdad?
"No dejes de asombrarte
ante un nuevo nacimiento de tu jardín...
no escondas ni la pena ni el dolor...
no saltes en pedazos,
no entregues tu diamante,
no permitas que se pierda tu cosecha...
¡busca la raiz!
Baja hasta tus valles
que éste es tu país,
donde están tus riendas,
tu espuma, tu verdad...
...donde naufragaste, haz crecer mil rosas..."
Lindo, como consigna de una mañana, ¿verdad?