La mesa es el altar de la familia.
Es ese lugar donde
lo humano y lo divino
se nutren mutuamente
en el darse.
Comunicación
de dimensión profunda y santa.
Única.
Aromas, sabores, secretos,
intuición, miradas, anécdotas y sonrisas...
Sonidos insustituibles:
los cubiertos rozan el plato, el cristal.
El crujir del pan tibio de tan fresco.
El "SHHH" de la soda O LAS BEBIDAS.
¡Y LAS VOCES!
CONJURO DE VOCES,
de todas las edades..
Confidencias y consejos...
¡LA MESA...!
tan sublime
como las uvas en cognac
que preparaba mi suegra..
¡LA MESA...
DULZURA CON SORPRESAS
EL SELLO DEL HOGAR!